martes, 28 de octubre de 2014

Arriba y abajo.

"La codicia es, desgraciadamente, muy superior a cualquier otra consideración." Esta declaración, del premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades 2014 es la mejor explicación que he leído sobre la situación de corrupción generalizada que vive nuestro sistema político, económico y social. La foto es la  flagrante demostración que el Carlos Marx economista sigue vivo y que la globalización necesita controles no solo políticos sino económicos.
Una de las primeras preguntas que me hago cuando sale un nuevo caso de corrupción es siempre:"Para que coño necesita más dinero con lo que ya debe tener?" ¿Para que quieren más si ya tienen todo lo que quieren y más? El capitalismo defendía que los cuadros dirigentes tenían que ser adinerados para que no cayeran en la tentación de lo ajeno y defiende los sueldos y otros emolumentos de la clase dirigente con el mismo argumento.
Todo lo que, en este país se escriba sobre corrupción, corre el riesgo de quedar desfasado antes de llegar a las redacciones de los medios. El día a día se hace insoportable e irrespirable para la gente normal, que son la inmensa mayoría de los  ciudadanos que cada día se levantan con el temor de encontrarse otro sapo en el desayuno. La corrupción no es patrimonio exclusivo de la clase política, seria demasiado fácil y simplista. Hay políticos corruptos y tienen que ser denunciados y condenados pero no podemos olvidar que sin gente dispuesta a untar a los políticos estos lo tendrían bastante más difícil de conseguir sus propósitos. El problema es complejo y muy peligroso pues estamos en niveles de corrupción donde las redes tienen una organización mafiosa que hunde sus raíces en todos los sectores de la sociedad. No hay rincón de nuestra organización social por la que se pueda poner la mano en el fuego. Esto no puede seguir y es la sociedad entera la que tenemos que firmar un pacto de honor para expulsar de la vida publica a este clan de mafiosos y para sacar de nuestras costumbres privadas cualquier tipo de benevolencia para con estos individuos. Socialmente tenemos que darnos órganos de control lo más potentes posibles y lo más exigentes que el respecto a las libertades democráticas nos permitan.
No vale con "pedir perdón" tenemos que exigir responsabilidades y devolución de las sumas "afanadas".
No nos engañemos los que pagan a los corruptos lo que buscan es poder, pero sin pasar por las urnas.
                                                La Foto.
.¿Quien dijo que Marx había muerto? Algunos dicen que la lucha de clases ya no es determinante para explicar la Historia. Los más atrevidos incluso llegan a pedir que los partidos socialistas cambien de nombre o incluso que la división derecha izquierda no es actual que ahora lo que se lleva es la transversalidad. Pues la foto de los subsaharianos subidos a la valla de Melilla contradice a todos esos gurús del nuevo pensamiento. Marx  no ha muerto esta subido a la malla, en este sistema nada es lo que parece, los que están abajo son los de arriba y los de lo alto de la valla son los que el sistema necesita explotar para seguir disfrutando del hoyo 18.

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