martes, 13 de mayo de 2014

¿Qué hacemos con Felipe?

Esta pegunta la hacia una amiga, ex diputada nacional del PSOE, en las redes sociales, después de la intervención del ex presidente en la sexta. Felipe a una pregunta de la presentadora del programa "El Objetivo" sobre la "Gran coalición" respondió: ""Si el país lo necesita lo deben hacer". En otro momento de la entrevista González apuntó que las formaciones tenían que responder a "lo que España necesite" en cada momento.
Yo pienso que a Felipe hay que escucharlo atentamente y saber que lo que dice esta siempre muy meditado y no es fruto del momento. Reconozco que la oportunidad política de la presencia de Felipe, en La Sexta es discutible por no calificarla de otra manera. También me parece que el programa parecía tener algo de encerrona, pues en varios momentos de la charla el ex presidente se quejo que lo habían llamado para hablar "de Europa y de Cataluña". De todos modos y con buen criterio profesional la periodista aprovecho las anteriores declaraciones  de Cañete e intento conseguir un titular. Lo consiguió en parte obligando a los maximos representantes del PSOE a salir en tromba a desmentir la posibilidad de una "Grosse Koalition" a la española.
Lo interesante políticamente seria saber lo que movió a Arias Cañete a plantear el tema, en este momento.
Pero me gustaría volver a Felipe González. El ex presidente no habla de un gobierno de gestión corriente, como tampoco habla de un gobierno de unicamente dos partidos, habla de una gobierno que defina lo que "España quiere ser en los próximos 10 años". Para González eso pasa por una reforma constitucional: "Vivimos en un país donde desde 1812 las Constituciones no se reforman; se dan por finiquitadas".
Este debate que propone Felipe se merece un mejor marco que una campaña electoral al parlamento europeo y seguro que volverá a a plantearse, más pronto que tarde. El bipartidismo está tocado del ala y parece que vamos a una fragmentación del electorado, lo que sin duda obligará a gobiernos de coalición de dos o más fuerzas. También parece claro que plataformas transversales están llamadas a tener un peso especifico en nuestra vida política. Nuestro futuro político me parece incierto pero lleno de posibilidades y de cambios para mejor. El reto de los jóvenes es hacer esta nueva transición buscando lo mejor para todos y nosotros los más mayores acompañarles y animarles a fortalecer la democracia y a propiciar la equidad no solo la igualdad.

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