lunes, 14 de junio de 2010

Pensar con los pies.


Hoy he leído el artículo semanal de Milio Mariño, en “La Nueva” y me recordé que tenía pensado escribir algo sobre los sindicatos y más específicamente sobre la convocatoria de huelgas.
La pasada semana se ha producido la primera reacción de las organizaciones sindicales a las medidas aprobadas por el gobierno. Los trabajadores públicos fueron los que iniciaron el baile con una jornada de paro el martes día 8 de junio. La respuesta fue menor de lo previsto. A la hora de explicar este estado de cosas se han apuntado las razones de siempre. Esta vez creo que hay que agregar otra, la fecha. Resulta que Correos, que me temo que es la mayor empresa pública con unos 70.000 trabajadores, tenía convocada, desde hace tiempo, huelga para el jueves día 10 de junio. Los trabajadores de Correos vienen luchando contra la privatización desde hace tiempo y ya han parado el mes pasado. Esta claro que estos trabajadores no están para perder dos días, el mismo mes y por lo tanto han pasado de la huelga de funcionarios.
La pregunta es ¿Por qué no se convoco el paro de los funcionarios para el jueves? Los que convocaron parecen olvidar la situación económica que estamos padeciendo.

No hay comentarios: