"Fartones".

La entrega de los galardones de los Premios Príncipe de Asturias de este año 2012, ha estado marcada por una expresión, asturiana que traduce el hastió de la gente por ciertas demostraciones de una forma de ver las cosas las cosas que ni de lejos responde a nuestra realidad económica. "Fartones" es la palabra escogida por los presentes, en las calles de Oviedo para expresar su desprecio hacia todos los presente. Carlos Boyero, el critico cinematográfico de "El País" aprovecha la ocasión primero para descubrir la palabra y luego para lanzar una critica severa a la monarquía. En su acepción más común un fartón es alguien que come mucho, que nunca ve saciada sus ganas de comer.
Actos como los de la entrega de premios, del pasado viernes hacen gala de una falta de pudor y suponen un agravio para el español de a pie que lo esta pasando muy mal. Las instituciones tendrían que tener mucho más cuidado a la hora de participar en estos saraos propios de otros tiempos. Cuando digo las instituciones incluyo a la jefatura del Estado que para mi gusto esta siendo demasiado protagonista en este periodo convulso. El Rey tiene que ser consciente de su responsabilidad y ejercerla con sencillez y con diligencia y no dejarse llevar por las declaraciones que ni le corresponden ni le favorecen.
Resaltar que al acto del viernes participaron no solo políticos, sino que se han juntado todo un mundillo que no es ni por asomo una imagen de la sociedad española.