viernes, 22 de enero de 2010

Me gusta.



Hoy tuve la ocasión de pasar un rato, en el entorno de “Los Patos” de Salinas. Aproveche para mirar y remirar las obras que se han realizado con cargo al “plan ZP”. Primero tengo que reconocer que me gusta, con esto quiero simplemente decir que las críticas vertidas no me parecen del todo justas. Es verdad que la vista hacia el este ya no es la que era, las obras posiblemente por imperativo técnico reducen la panorámica que se tenía desde la acera de la calle. Luego paseando por Pablo Laloux se puede dar uno cuenta que esa perspectiva ya había desaparecido en casi la totalidad del frente playero. Lo que si es lamentable es que en ese lugar se permita el estado del solar del primer chalé del paseo.
La cafetería y su terraza son una pasada y la madera del suelo hace muy bonito. La plazoleta del Náutico me parece más discutible, aunque depende del uso que se le quiera dar. Esta claro que no sirve para eventos con mucha gente, como podrían ser conciertos o actuaciones. Quizás no sea ese el uso pensado para este espacio. Creo que todo será más claro cuando la gente tome posesión de estos dos espacios y fijen sus prioridades.
Resaltar que el mobiliario urbano es funcional y tiene pinta de robusto, por fin los accesos son aceptables con el único pero de las escaleras que unen la cafetería y la plazoleta que tienen pinta de ser bastante inclinadas. Lo repito el conjunto me gusta y solo espero que la gente tome posesión de este espacio urbano para darle color y calor.

2 comentarios:

clau dijo...

pegate un paseo por la tarima de la cafeteria, no se ha inagurado y ya tiene defectos en el barnizado y unas cuantas tablillas rotas
un saludo
claudio diaz aznar
www.contraola.com

Manuel Colero dijo...

El día que estuve no me di cuenta. A mi la madera me encanta y creo que tendríamos que utilizarla más. Tengo un hórreo al lado del mar y es el material que mejor resiste.
Ahora tiene poco sentido hablar de esto cuando algunos desalmados se han cargado la puerta de los servicios.
De todos modos pienso que cuando se trabaja con dinero publico hay que intentar que el mantenimiento sea lo menos costoso posible y no se si la madera entra en ese parametro.