sábado, 14 de marzo de 2009

Privatizar.


Leo, en los dos diarios locales, la entrevista de Álvaro Álvarez y una vez más me confirma en mi apreciación del secretario general del PSOE de Avilés. Cuando lo entrevistábamos, en Radio Avilés lo recibía diciéndole “ojo con lo que dices no vaya a subir el pan”. Puedes estar de acuerdo con el o no estarlo pero habla claro. Sus declaraciones sobre la parcial privatización de la gestión del suministro de agua tienen sentido lo que no quiere decir que solo la empresa privada es capaz de gestionar con eficacia un servicio como el agua. Es verdad que el servicio de suministro de agua municipal es deficitario, en la práctica totalidad de los municipios que siguen asumiendo este servicio. ¿Por qué? Pues simplemente porque se cobra un precio político por el servicio. Dicho de otra manera se cobra menos por el servicio de lo que supone su coste real. ¿Por qué? Pues simplemente porque se considera que el agua es un bien imprescindible para garantizar no solo la salud si no el progreso. Normalmente el servicio público de suministro de agua es deficitario, en todos los ayuntamientos.
Si es así ¿Cómo puede interesar a la empresa privada? Simplemente porque van a reducir gastos y normalmente subir el recibo. Reducir gastos, principalmente, rebajando la masa salarial, invirtiendo en reducir las perdidas de agua y buscando nuevos suministros. La subida del recibo es la siguiente opción, tengamos en cuenta que el agua no es un bien excesivamente caro y el precio político aplicado hace que posiblemente su precio este desfasado respecto a otros bienes de primera necesidad como la luz. Por otro lado las empresas no tienen que presentarse cada cuatro años a las elecciones y los contratos suelen ser bastante largos. Por otra parte las empresas pueden justificar la subida con las inversiones que están obligadas a realizar, por la normativa europea, cambiar las tuberías de alta de Uralita y las de baja de plomo. También tienen que invertir para subsanar las pésimas condiciones de la red, responsables de las fugas. ¿Quiere decir esto que hay que privatizarlo todo? Claro que no. Lo que hay que hacer es terminar con los servicios deficitarios y subvencionar a los vecinos que no pueden asumirlos. (La foto es de Miki López y sale en "La Nueva España")

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